Santa Cruz tuvo un fiesta internacional de la cumbia en Fexpocruz y los que fueron ni siquiera debían pagar entrada: anoche, Alfredo Jaldín corrió con el gasto. Miles de jóvenes fueron a bailar con los uruguayos Nietos del Futuro o Vi-Em (entre otros) o La Hora Loca, a beber y a oír lo que tenía que decir el candidato a rector que pudo pagar la potencia del sonido, las luces y la apoteosis que se adueñó de la noche de los cierres de campaña de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm).
Derroche sin miramientos, el festejo de las últimas horas de campaña de Jaldín no tuvo parangón y la multitud que logró reunir —tan tupida que uno ni siquiera se podía mover— consiguió abarrotar el predio de los parqueos de la ‘Fexpo’. Así, a las 21:30, con el tumulto al frente y con Juan Carlos Paz, su candidato a vicerrector al lado, un envalentonado Jaldín se atrevió a decir que la noche era fría, pero que todo le indicaba a él que el día de la votación sería caluroso porque él cree que va a ganar sin necesitar de una segunda vuelta.
Nada se sabe sobre cómo hizo Somos U para pagar una superproducción de esta envergadura, sobre quiénes pusieron los recursos y si a los docentes y a los universitarios les alcanza.
Lo único que quedó claro es el desequilibrio que produjo su cierre, tan atestado como cualquier concierto con artistas extranjeros bien producido, frente a la más módica fiesta de Waldo López, de Primero La Gabriel, donde sí hubo varios DJ, mucha cerveza Samba y la crítica de López al derroche del que hizo alarde el otro candidato. “Donde se derrocha así en la fiesta de cierre de campaña, hay que ver si no hay corrupción”, dijo. Poco antes de las 23:00, Primero La Gabriel ya estaba de retirada.
Poco más improvisada apareció la fiesta de cierre de Unidos, de Saúl Rosas, que se terminó haciendo en la cancha La Bombonera, en el barrio San Luis, pese a que solo se había convocado a cierre de campaña ‘cultural’ en los módulos.
Igual que Jaldín y que López, Rosas tuvo su rifa, solo que él acabó antes de las 20:00 y se marchó de ese campo de tierra poco iluminado, donde los gladiadores de Calle 7, de Unitel, trataron de animar al puñado de asistentes que se apostó frente a un pequeño escenario a medio armar, con frío y con suficiente cerveza. Una orquesta, el cantante Bonny Lovy y el grupo cochabambino Plan B fueron su plato fuerte.
En la Fexpocruz, la noche de Jaldín prometía alargarse hasta la madrugada: Diego Ríos, La Noche, PK-2 y Dawill fueron las constelaciones que sostuvieron el cartel donde se promocionó quien quiere volver a conducir la universidad cruceña en el periodo 2016-2020. Noche de fiestas donde lo académico fue lo último que se mencionó entre los asistentes.
Últimas horas de campaña
Si el final fue una competencia para ver quién organizó el mejor baile y trajo la mejor música gratis, en el día, la pulseada en la ciudad universitaria fue para saber quién movía más gente en las caravanas de despedida del mes de campaña electoral.
Cerca del mediodía, López quiso corcovear montado sobre una ‘marea roja’ y llevó a centenares de marchistas de banderas carmesí a ocupar físicamente la ‘U’. Por la tarde, Jaldín no se quedó atrás y movilizó otra caravana verde lechuga, ruidosa también. Rosas se batió con musicones en las facultades y Miguel Cadima, Sergio Justiniano y Gustavo Coimbra protestaron una y otra vez contra los ‘candidatos del gasto’. Solo quedaba eso: protestar
No hay comentarios:
Publicar un comentario