En una jornada sin mayores incidentes, la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm) eligió ayer a sus representantes para cinco instancias, para el periodo 2014-2016. La demora en la apertura de las mesas de sufragio fue el mayor inconveniente que sortearon los electores, que también fueron ‘bombardeados’ con campaña electoral.
En estas elecciones los docentes y estudiantes nominaron a los miembros del Ilustre Consejo Universitario (ICU), a los delegados de la Federación Universitaria Local (FUL), a los consejeros de carrera y facultativos y a los dirigentes de los auxiliares de cátedra.
Pese a que la Corte Electoral Permanente de la Uagrm había previsto que la votación se iniciara a las 8:00, muchas mesas lo hicieron dos horas después por falta de jurados electorales. Ocurrió así en las mesas 259 y 260, donde los estudiantes que hicieron fila desde temprano tuvieron que presionar, con silbos y gritos, para que el sufragio comience.
“No es posible que nos hagan esperar tanto. Yo llegué temprano (a las 8:00) para poder votar y luego ir a mi trabajo”, dijo la estudiante Martha Gutiérrez, una de las universitarias que aguardaba en la fila de la mesa 259.
En otras mesas hubo quejas de algunos estudiantes porque sus nombres no figuraban en las lista que entregó el órgano electoral a los delegados. Los inconvenientes se solucionaron con la intervención de los delegados de la Corte Electoral.
Campaña hasta lo último
Por otro lado, la prohibición de hacer campaña tampoco se cumplió, toda vez que los frentes la hicieron dentro y fuera de los predios universitarios. Muchos candidatos, junto con sus seguidores, recorrieron las filas invitando refresco, panchito, empanada y otros alimentos con el fin de convencer a los estudiantes para que los apoyen. Con los alimentos también entregaban afiches, volantes, manillas y otros distintivos que tenían sus siglas.
El presidente de la Corte Electoral Permanente, Severo Hoyos, destacó, al final de tarde, que la elección se desarrolló en un clima de tranquilidad, pues dijo que fueron pocas las quejas que llegaron hasta esa instancia, a diferencia de otros actos eleccionarios en los que hubo hasta quema de ánforas.
Poco antes de las 21:00 hubo una gresca entre seguidores de los frentes Trinchera y Unir. Dos jóvenes de esta última organización estudiantil, Moisés Mariscal y Dagner Hebert Guzmán Cuéllar, fueron evacuados hasta un centro asistencial en una ambulancia. El primero sufrió un desmayo y el segundo dijo haber sido agredido a golpes.
Hasta el cierre de esa edición, aún se realizaba el escrutinio de los votos en el campus
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