El aprendizaje de una segunda o tercera lengua es una inversión que facilita las relaciones empresariales.

Según los últimos datos, el 72% de las ofertas de empleo requieren del conocimiento de alguna lengua extranjera. "El aprendizaje de una segunda lengua, y en algunos casos de una tercera, no es una pérdida de tiempo como antiguamente se pensaba, sino que se trata de una inversión, porque el aprendizaje de otro idioma no solo acrecienta las posibilidades de conseguir un mejor trabajo, impactando positivamente en su situación económica personal, sino que brinda la oportunidad de hacer buenos negocios y conocer otras culturas", resaltó Alcibíades Ribera, consultor financiero.

Ejemplos de su importancia. Para las compañías internacionales es fundamental contar en sus filas con personas que puedan mantener una conversación con representantes extranjeros, realizar presentaciones e incluso viajar a países de habla diferente para cerrar alianzas estratégicas, sin que el idioma sea un impedimento. "Además, tener equipos de trabajo bilingües significa tanto un plus como un ahorro monetario, ya que no se necesita contratar traductores o intérpretes para poder realizar o incluso entender los planes de negocio", resaltó Ribera.

Lo que se viene. Brasil es uno de los países con mayor proyección y crecimiento en los próximos años. "La bolsa de comercio de San Pablo es hoy la segunda bolsa del mundo detrás de la de Hong Kong. Petrobras es la segunda empresa petrolera después de Exxon Mobil, los índices de crecimiento para la economía brasileña son de los más atractivos del mundo. Por estas razones, el portugués será un idioma de aprendizaje casi excluyente para todos aquellos que quieran hacer negocios o conseguir mejores trabajos", agregó.

Los idiomas que más se hablan. Según la Revista de Economía que habla sobre las principales bolsas de valores en el mundo, resalta que los principales idiomas que hablan los que interactúan en esos escenarios son: el inglés, español, mandarín, portugués, alemán, árabe, entre otros.