Vecinos que representan a diferentes instituciones de la ciudadela Plan 3.000 llegaron hasta las oficinas del rector de la universidad Gabriel René Moreno para conocer por qué se retrasa la posibilidad de implementar en este barrio una facultad desconcentrada de esta casa de estudios. Los vecinos, que cuentan con el apoyo de una diputada del MAS, aseguran tener la documentación que respalda su solicitud y solo falta la voluntad del rector para dar curso a un estudio que determine si la inquietud es factible.
Vecinos tienen el apoyo de una diputada del MAS. A la cabeza de la diputada por el Movimiento al Socialismo, Adriana Arias, un grupo de profesores, dirigentes de unidades vecinales y de grupos sociales, llegó hasta las oficinas del rector de la universidad Gabriel René Moreno, Saúl Rosas, quien atendió a los representantes vecinales, para explicar que la universidad no cuenta con recursos para realizar los estudios que la ley demanda, para instalar una unidad educativa en la ciudadela.
“El tema es económico principalmente, la universidad tiene un déficit de al menos 100.000 bolivianos y se necesitan recursos adicionales para realizar esas gestiones”, aclara el vicerrector Osvaldo Ulloa, que en anterior oportunidad recibió a este grupo de personas que promueven esa inquietud. “Ellos (vecinos) se apegan a una resolución del ICU (Ilustre Consejo Universitario) para pedir que se desconcentre una unidad académica, y se les sugiere que realicen esos trámites ante otros diputados, parlamentarios y senadores, ya que tienen llegada al gobierno, para dar curso a agilizar el pedido”, explica Ulloa.
Identifican las facultades de mayor demanda para el Plan. “Es un gasto importante el que hacen los alumnos que viven en el Plan y deben llegar hasta la universidad, nuestra solicitud lleva esperando desde el 2010”, replica Marisol Rojas, dirigente vecinal de la ciudadela Plan 3.000.
Derecho, Auditoría, Contabilidad y Gestión de Procesos, son las 4 carreras de mayor demanda de parte de los alumnos que viven en el Plan y de aquellos que pronto dejarán las aulas para continuar una carrera académica.
Se estima que al menos existen 60 colegios en la ciudadela, entre privados y fiscales, sumando un total de 60.000 estudiantes, y un promedio de 4.800 que todos los años pasan de la etapa escolar a la universitaria, por ello la demanda es considerada más que justificada por los vecinos y dirigentes.
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